La primera semana de trabajo del Racing concluye con un balance muy satisfactorio para todos, cuerpo técnico y jugadores. El próximo entrenamiento de la plantilla será ya en Alemania, puesto que Muñiz ha dado día y medio de descanso a los jugadores, la tarde de ayer y hoy domingo, tras la exigente pauta de dobles sesiones que ha llevado a cabo.
La sesión de ayer estuvo dirigida y supervisada por el preparador físico Fernando Gaspar y tenía como función trabajar la fuerza tanto en el tren superior como en el inferior del cuerpo. El ambiente fue distendido entre los jugadores, con ejercicios con balones medicinales. Las bromas de la mayoría de la plantilla iban dirigidas a Memé Tchité, uno de los jugadores más queridos en el vestuario.
Diálogo.
En una de las partes del entrenamiento la plantilla estuvo dividida en varios grupos. El objetivo era realizar una serie de ejercicios en el menor tiempo posible y el grupo de Tchité fue el más lento. El delantero tuvo que sufrir la represalia de sus compañeros atravesando un pasillo formado por los propios jugadores.
Muñiz aprovechó la sesión de trabajo para hablar con sus futbolistas de manera grupal línea por línea; es decir, defensas, centrocampistas y delanteros. El asturiano dialogó por un espacio prolongado al término del entrenamiento con uno de los fichajes de esta temporada, Jonathan Pereira, del que espera mucho este año tanto en banda izquierda como en punta.
La sesión de ayer estuvo dirigida y supervisada por el preparador físico Fernando Gaspar y tenía como función trabajar la fuerza tanto en el tren superior como en el inferior del cuerpo. El ambiente fue distendido entre los jugadores, con ejercicios con balones medicinales. Las bromas de la mayoría de la plantilla iban dirigidas a Memé Tchité, uno de los jugadores más queridos en el vestuario.
Diálogo.
En una de las partes del entrenamiento la plantilla estuvo dividida en varios grupos. El objetivo era realizar una serie de ejercicios en el menor tiempo posible y el grupo de Tchité fue el más lento. El delantero tuvo que sufrir la represalia de sus compañeros atravesando un pasillo formado por los propios jugadores.
Muñiz aprovechó la sesión de trabajo para hablar con sus futbolistas de manera grupal línea por línea; es decir, defensas, centrocampistas y delanteros. El asturiano dialogó por un espacio prolongado al término del entrenamiento con uno de los fichajes de esta temporada, Jonathan Pereira, del que espera mucho este año tanto en banda izquierda como en punta.
Fuente: As