RACING (COLÓN) 3 – ITALO 0
Racing: Ramundo; Villalba, Farré, Gómez, Tamburi; Demarco, Magallanes, López; Salomón, Ferreyra, Bravo. DT: Araguás. Italo: Falca; Ramos, Nicolai, Aranda, Zari; Marcos Garbolino, Chamorro, Mauricio Garbolino; Gómez, DiPaolo, Lagneaux. DT: Garbolino. Field: Hugo VicceiReferee: Toti Arel. Linesman: Palacios y Berterini. Goals: 28’ y 72’ Ferreyra, 37’ Bravo (R).
Cambios: Michelángelo x López, Toledo x E. Gómez y Álvarez x M. Tamburi (R). Obregón x Falca y Campagno x Ramos (I).
Racing es una tromba, sigue con puntaje ideal y en la fresca jornada dominical se sacó de encima al entonado conjunto santafecino. “Nacho” Ferreyra, autor de dos goles, fue la figura del match mientras que la restante conquista fue una obra maestra de Facundo Bravo.
La Academia que dirige Araguás es la antítesis de la de Avellaneda; mientras en el Cilindro continúan con la huelga, La Mitre fue testigo una vez más del terrible momento que está atravesando el aurinegro. En uno de los días más falsos del año, recibía al mismo Italo que siete días atrás había goleado a Acevedo y que venía con la moral más alta que Buzzi pero que recibió un cachetazo duro tras noventa minutos de despliegue académico.
Desde el vestuario nomás Ferreyra empieza a informarle al público que corajeó al frío que él iba a ser uno de los protagonistas del domingo y con un toque displicente hace lucir a Falca tras un bonito pase de López. Contesta la visita a los 11’ cuando loa zaga local duda a la salida de un corner y el muy digno de “Topo” Gómez cabecea por sobre el travesaño dentro de la mismísima área menor que custodia Ramundo. Eso fue casi todo de lo poco que mostró el team de Garbolino, intentaba salir de contra pero nunca cosechaba frutos y Racing insinuaba tanto que pasado el cuarto de hora ya merecía el primero. A esta altura ya había metido bomba en el palo mi amigo Enzo Gómez y antes de los 30’el mismo Gómez la pelea, la hace toda solito y tras guapear hasta a Magoia habilita a “Nacho” Ferreyra que tras tomarse un vermú dentro del área y ver que nadie lo sale a marcar, toma la decisión de cruzar el remate y hacer estéril el vuelo de Falca para poner en el marcador la merecida diferencia. La locomotora no detiene su marcha y nueve más tarde (me pongo de pie y se los cuento): doble sombrero del pibe Bravo para dejar a medio wheelwright desorientado y luego bolear de derecha para que la caprichosa quede pegada al palo y solo despierte aplausos desde los cuatro costados. El match iba por los carriles normales pero Arel empieza a tarjetear y caliente el clima, a nuestro gusto, innecesariamente. “Toti” manda a todos a los vestuarios cuando Mirta le da la orden de que los choris ya están y “Huevo” le entra sin asco a tres embutidos.
Se arman los “mateycos” para apaciguar a la helada que ya teníamos en el lomo y con furia la Acadé quiere sellar el partido desde el minuto cero del complemento. Cosa que no consigue porque sus mismas ansias de golear al rival le impedían liquidar el juego. Italo comienza a quedar demasiado expuesto en defensa y el pergaminense Ferreyra se hace una panzada.
20’ marcaba el reloj e Italo tira el offside como Mandiyú en sus peores épocas y Tamburi define por arriba del ya lesionado Falca pero el cuero sale apenas desviado. Una vez achica muy mal la visita, y a los 27’ Ferreyra se anota nuevamente en el tanteador tras eludir al portero con una galera lujosa y definir a puerta vacía.
Ese era el momento para que Arel diga “muchachos gracias por venir, hace un frío de la c… de mi tía, vamos a tomar un chocolate a lo de Randal que es el cumple que este partido está terminado”, pero no, “Toti” le sacude hasta los 49’. Por suerte en ese ratito que quedaba se vio un hecho histórico y que los Guinness: “El Peor Penal pateado de la historia”, más malo que el de Costacurta contra Boca y ni que hablar del de Diego a Yugoslavia, la nota la dio Mauricio Garbolino a los 42’ cuando tras tomar muuucha carrera le dio un pase en las manos a Ramundo que solo tuvo que agacharse. Garbo redondeó una tarde terrible, coronó con este penal cerró una jornada en la que nunca pudo proyectarse con claridad por su sector ni hacerse dueño de la bocha. Casi un retrato de lo que fue su equipo, una sombra de aquel que bailó a Acevedo y en el que solo se puede rescatar como muy digno al “Topo” Gómez y al zurdito DiPaolo.
El tren dejó atrás una nueva estación y su próxima parada es Ocampo nuevamente en el Viccei, el maquinista Araguás es el empleado del mes y Cristina puede dormir sin frazada porque el sueño de su pata de fierro súper rápido ya es una realidad.
Me tomo una licencia y les dejo un detalle del domingo en La Mitre: Como sucedió con “Laucha” Molina el finde pasado, ayer Berterini estuvo de asistente de Arel, sí, el mismo Berterini que hace un mes atrás jugó por ejemplo en la goleada que su equipo Cultural se comió en El Desierto. Los más mal pensados espectadores del partido ayer suponían que cualquier buen muchacho que golpee la puerta de 43 y 23 y este dispuesto, puede ser árbitro de este bendito torneo.
Desde el vestuario nomás Ferreyra empieza a informarle al público que corajeó al frío que él iba a ser uno de los protagonistas del domingo y con un toque displicente hace lucir a Falca tras un bonito pase de López. Contesta la visita a los 11’ cuando loa zaga local duda a la salida de un corner y el muy digno de “Topo” Gómez cabecea por sobre el travesaño dentro de la mismísima área menor que custodia Ramundo. Eso fue casi todo de lo poco que mostró el team de Garbolino, intentaba salir de contra pero nunca cosechaba frutos y Racing insinuaba tanto que pasado el cuarto de hora ya merecía el primero. A esta altura ya había metido bomba en el palo mi amigo Enzo Gómez y antes de los 30’el mismo Gómez la pelea, la hace toda solito y tras guapear hasta a Magoia habilita a “Nacho” Ferreyra que tras tomarse un vermú dentro del área y ver que nadie lo sale a marcar, toma la decisión de cruzar el remate y hacer estéril el vuelo de Falca para poner en el marcador la merecida diferencia. La locomotora no detiene su marcha y nueve más tarde (me pongo de pie y se los cuento): doble sombrero del pibe Bravo para dejar a medio wheelwright desorientado y luego bolear de derecha para que la caprichosa quede pegada al palo y solo despierte aplausos desde los cuatro costados. El match iba por los carriles normales pero Arel empieza a tarjetear y caliente el clima, a nuestro gusto, innecesariamente. “Toti” manda a todos a los vestuarios cuando Mirta le da la orden de que los choris ya están y “Huevo” le entra sin asco a tres embutidos.
Se arman los “mateycos” para apaciguar a la helada que ya teníamos en el lomo y con furia la Acadé quiere sellar el partido desde el minuto cero del complemento. Cosa que no consigue porque sus mismas ansias de golear al rival le impedían liquidar el juego. Italo comienza a quedar demasiado expuesto en defensa y el pergaminense Ferreyra se hace una panzada.
20’ marcaba el reloj e Italo tira el offside como Mandiyú en sus peores épocas y Tamburi define por arriba del ya lesionado Falca pero el cuero sale apenas desviado. Una vez achica muy mal la visita, y a los 27’ Ferreyra se anota nuevamente en el tanteador tras eludir al portero con una galera lujosa y definir a puerta vacía.
Ese era el momento para que Arel diga “muchachos gracias por venir, hace un frío de la c… de mi tía, vamos a tomar un chocolate a lo de Randal que es el cumple que este partido está terminado”, pero no, “Toti” le sacude hasta los 49’. Por suerte en ese ratito que quedaba se vio un hecho histórico y que los Guinness: “El Peor Penal pateado de la historia”, más malo que el de Costacurta contra Boca y ni que hablar del de Diego a Yugoslavia, la nota la dio Mauricio Garbolino a los 42’ cuando tras tomar muuucha carrera le dio un pase en las manos a Ramundo que solo tuvo que agacharse. Garbo redondeó una tarde terrible, coronó con este penal cerró una jornada en la que nunca pudo proyectarse con claridad por su sector ni hacerse dueño de la bocha. Casi un retrato de lo que fue su equipo, una sombra de aquel que bailó a Acevedo y en el que solo se puede rescatar como muy digno al “Topo” Gómez y al zurdito DiPaolo.
El tren dejó atrás una nueva estación y su próxima parada es Ocampo nuevamente en el Viccei, el maquinista Araguás es el empleado del mes y Cristina puede dormir sin frazada porque el sueño de su pata de fierro súper rápido ya es una realidad.
Me tomo una licencia y les dejo un detalle del domingo en La Mitre: Como sucedió con “Laucha” Molina el finde pasado, ayer Berterini estuvo de asistente de Arel, sí, el mismo Berterini que hace un mes atrás jugó por ejemplo en la goleada que su equipo Cultural se comió en El Desierto. Los más mal pensados espectadores del partido ayer suponían que cualquier buen muchacho que golpee la puerta de 43 y 23 y este dispuesto, puede ser árbitro de este bendito torneo.
(Suplemento el 10 Diario La Voz de Colón)
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